Acabo de ver hace unos minutos el primer episodio de Viaje a la Estrellas: La Nueva Generación, el episodio se llama Encuentro en Farpoint. Me puse en la piel de los fanáticos que presenciaron ese primer capítulo cuando se emitió hace ya algunos años y realmente me ruboricé, sentí como si se cumpliera un anhelado sueño, es que solo imaginen, después de casi 20 años de haberse cancelado la serie original volver a vivir la travesía del Enterprise enfrentado nuevos peligros y nuevas cilivilizaciones, con una tripulación renovada, una nave con tecnología de punta y con la misma mística de explorar el espacio y "llegar a donde nadie ha llegado antes".
Esta versión que ví la bajé del internet por Emule, está doblada al español de España y por eso suena un poco diferente al principio, porque en Ecuador estábamos acostumbrados al doblaje latinoamericano, sin embargo, tengo que reconocer que el primero es un doblaje con más sentimiento aunque el segundo a ratos me parece más fiel al original porque no deforma los nombres y ciertas frases que sí lo hace el hecho en España. Pero bueno, para gustos y sabores... En sí, el primer episodio es un poco flojo en la trama, como que es poca historia para dos horas de transmisión, no obstante, los efectos son muy buenos y para el momento en que se desarrollaron deben haber sido considerados como los mejores para una serie de tv.
Creo, sin embargo, que el tema y su tratamiento quizás fue pensado por Rodenberry (creador de la serie) con el sentimiento de la serie original: una nave de exploración espacial que descubre nuevas formas de vida y se enfrenta a los restos que esto supone, manteniendo siempre la unidad de la tripulación como la principal fortaleza para cumplir con éxito las misiones. Hay subtramas interesantes que se perpetuarán durante toda la serie e incluso continuarán en las películas, por ejemplo: el romance anterior a la misión entre Deanna Troi y William Riker, la presencia de un Klingon en el puente de mando (Worf, criado por humanos y miembro de la Flota Estelar), el aparecimiento de Q (ser omnipotente y que disfruta de poner pruebas al capitán Picard), la aparente atracción entre Jean Luc y la Dra. Beverly Crusher, el deseo del androide Data por experimentar las emociones humanas, la nueva tecnología de la nave con la computadora que lo resuelve todo y la holocubierta u holosección (versión latinoamericana y española, respectivamente), el hecho de que este nuevo Enterprise es una nave clase Galaxia, la más avanzada de la flota, la alianza entre la Federación Unida de Planetas y el Imperio Klingon que terminó con años de guerra, entre muchas otras cosas. Se pueden decir muchas cosas pero lo que realmente importa es que fue el inicio de una nueva ilusión, del renacimiento de un sueño que hemos compartido muchos fanáticos y que de alguna forma nos alegra la vida y nos permite identificarnos con una visión del futuro posible de la humanidad.
Adolfo Cevallos.
Imagen 1: La tripulación de Star Trek: La Serie Original. Fue transmitida durante tres años (1966-1969), se canceló por bajo rating, pero fue suficiente para generar todo el fenómeno Star Trek. El único que está sentado es el capitán James Tiberius Kirk.
Imagen 2: Tripulación del Enterprise de la nueva generación. Sentado en el centro está el capitán Jean Luc Picard. La serie se estrenó en 1987 y duró siete años, hasta 1994, con una sintonía promedio por episodio de 20 millones de televidentes. ¡Todo un récord!
